Desarrollo de la actividad:
Colocarse frente al niño y decirle que se fije en su cara y que imite lo que usted va haciendo. Posteriormente realizará algunos de los ejercicios propuestos a
continuación para trabajar y fortalecer la lengua, la mandíbula, los labios y el paladar.
También puede realizar el ejercicio frente al espejo para que ellos se vean también y sepan lo que están haciendo. Si es necesario se ayudará de tarjetas con
dibujos para que los niños sepan exactamente lo que hay que hacer.
Escoger de 2 a 3 ejercicios de cada praxia:
- Ejercicios de praxias linguales
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Mover la lengua de arriba a bajo.
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Mover la lengua de un lado a otro.
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Sacar y meter lengua de la boca a distintos ritmos.
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Enrollar la lengua.
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Realizar movimientos giratorios de la lengua en el interior de la boca.
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Doblar la lengua en sentido horizontal, formando un canal con la misma éntre los labios.
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Realizar movimientos de la lengua alrededor de los labios.
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Hacer fuerza con la lengua sobre ambas mejillas.
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Morder la lengua primero doblada hacia arriba y después doblada hacia abajo.
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Poner la lengua ancha tocando ambas comisuras.
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Intentar tocar la nariz con la lengua.
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Hacer la lengua en forma de tubito con aire o forma de U.
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Tocar con la punta de la lengua el paladar.
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Tocar los labios con la lengua mediante movimientos verticales.
- Ejercicios de praxias labiales:
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Apretar y cerrar los labios.
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Abrir y cerrar la boca como si bostezara.
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Hacer besos al aire.
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Silbar.
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Sonreír sin abrir la boca.
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Sonreír con la boca abierta.
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Colocar un lápiz entre la nariz y el labio superior e intentar que no se caiga.
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Mover los labios hacia la derecha y hacia la izquierda.
- Ejercicios de praxias de mandíbula:
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Abrir y cerrar la boca.
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Articular las vocales /i/, /u/, /o/, /e/, /a/.
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Emitir ronquidos.
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Mover
la mandíbula hacia la derecha y hacia la izquierda.
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Hacer como si masticáramos un gran chicle con la boca
cerrada.